
Carles Pi i Sunyer, (Barcelona, 29 de febrero de 1888–Caracas, 15 de marzo de 1971) fue un ingeniero industrial y político.
Fue presidente de Esquerra Republicana de Catalunya entre 1933 y 1935, partido por el que fue elegido diputado a Cortes por la circunscripción de Barcelona en 1931. Fue Ministro de Trabajo en 1933 y alcalde de Barcelona en 1934.
El golpe de estado de Companys en 1934 lo llevó a prisión donde permaneció hasta febrero de 1936 cuando la victoria del Frente Popular en las elecciones le devolvió nuevamente al frente del consistorio barcelonés, donde permanecerá hasta julio de 1937.
Ocuparía asimismo las consejerías de Cultura y Finanzas de la Generalitat de Cataluña y, tras la Guerra Civil se exilió.
SUS FRASES:
En su libro “L’aptitud econòmica de Catalunya” (1927) señala:
“La mezcla de pueblos nórdicos y meridionales en las orillas del Mediterráneo ha dado a lo largo de la historia frutos muy interesantes. Sombart recoge y encuentra muy posible la hipótesis, muchas veces expresada, de que las civilizaciones de la antigüedad clásica, y más particularmente la griega y la del Renacimiento italiano, fueron el resultado de la unión de pueblos septentrionales inmigrantes con las poblaciones autóctonas de los respectivos paises. El mismo fenómeno parece repetirse en las tierras occidentales. La florida catalana medieval quedaría así unida a un círculo de conjunto de todos los pueblos de la costa norte de la mar interior. En este círculo, el proceso de Catalunya toma, sin embargo, unas características particulares. No llega nunca a la amplitud de las civilizaciones nombradas, pero en cambio tiene una virtud de persistencia…es probable que el secreto de la persistencia de nuestro pueblo, y en particular de su aptitud económica, provenga de la unión de elementos nórdicos y meridionales que han formado un pueblo que, tanto por sus orígenes étnicos como por la situación geográfica, puede inscribirse en el sistema occidental. Es evidente que para otras razas y otras posiciones en el mapa, las causas y los resultados pueden ser diferentes, pero en relación con el mundo mediterráneo, al cual pertenece Catalunya, la explicación de la mayoría de las nuestras aptitudes por la dualidad básica originaria nos parece lógica y fundamentada”.
«El pueblo catalán ha sufrido a menudo circunstancias adversas y ha pasado épocas de decadencia, pero nunca estas adversidades y el desfallecimiento han llegado al núcleo de la vida económica catalana, de la aptitud étnica…. esto demuestra que no es producto de una casualidad, del azar a o de circunstancia externas favorables, sino que es la manifestación del fondo invariable del pueblo catalán«.
ASÍ ENSALZAN SUS PALABRAS Y SUS ACTOS LOS PODERES PÚBLICOS:
Plaza de Carles Pi i Sunyer, Barcelona
Calle de Carles Pi i Sunyer, Argentona (Barcelona)